Los riesgos o complicaciones tras la rinoplastia son infrecuentes, y su relación a continuación tiene como finalidad darte una buena información para no alarmarte. Siempre existe un riesgo anestésico que habrás de considerar a la hora de decidir sobre tu intervención. Por esta razón realizamos la cirugía en un lugar óptimo como es un hospital, donde se encuentran tanto el equipo técnico, como el personal médico, apropiados para resolver cualquier complicación en el caso de que se presentara. El mayor inconveniente resulta del taponamiento nasal que impide respirar por la nariz debido al bloqueo parcial en el paso del aire por secreciones e inflamación, pero esto remite en unos días. La infección es una complicación posible en cualquier cirugía, pero es extremadamente rara en la rinoplastia.